Enseñanza sobre el diezmo No hay más de un misterio
Enseñanza sobre el diezmo No hay más de un misterio
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, «El comedor ha sido bendecido con una donación de importancia que le permitirá funcionar sin sobresaltos durante los próximos meses»
Con el sentido amplio del mandamiento cumplimos cada ocasión que ayudamos a nuestra parroquia o capilla a los gastos de culto, de construcción o de caridad: nuestra “limosna” de la ceremonia dominical, el suscripción de un estipendio, el participar en una kermés o en una rifa.
En ningún zona de las Escrituras se encuentra que Dios demanda el diezmo de hacienda. No obstante, tenemos el caso del fariseo y el publicano en la similaráEngaño de
El idioma diario está repleto de expresiones que enfatizan la importancia de ciertas situaciones o personas. Algunas de estas expresiones incluyen:
Ahora, ¿Te has puesto a pensar, las veces que has ofrendado sin el conocimiento que tal acto demanda? Y siendo esto una verdad, evidentemente muchas de tus “ofrendas” no llegaron al Señor.
Un ejemplo del uso de aquella sería el subsiguiente: «El presidente del gobierno tuvo que abandonar la reunión porque recibió una emplazamiento de suma importancia».
Por eso los Patriarcas y todos los hombres que en la caducidad querían ingresar a la presencia de Dios para hacerle cualquier tipo de ofrenda sabían que, para que estas sean aceptadas, primero debían hacerlo a través de una ofrenda cruenta; y eso que esos sacrificios no eran más que sustitutos, figura de Aquel que habría de ofrendarse a Sí Mismo.
En consecuencia, son pocos los judíos que conocen su ascendencia con exactitud; la decanoía no sabe si pertenece o great post to read no a la tribu de Leví, por lo que no están autorizados a recibir diezmo alguno.
Por otro ala, igualmente se pretende insistir con la idea del “diezmo” como here sostén para los que viven para evangelio argumentando lo que dice el apóstol sin considerar en profundidad el espíritu de la pagaré. Dios autoriza a que los que vivan “para” el evangelio que vivan “del” evangelio, no deje del diezmo.
Asimismo siquiera podemos olvidarnos de la existencia de otra dicho verbal que integra el término que ahora estamos analizando. En concreto nos estamos refiriendo a «ser de la importancia de alguno».
El que quiera diezmar debe advertir toda la arbitrio de hacerlo; y si lo hace, debe ser voluntariamente y con discernimiento. Pero, lo que no se debe hacer, es predicar “el diezmo” como doctrina para la Iglesia, porque no lo es.
El pensamiento crítico gracias al cual alguno puede analizar u observar una situación utilizando argumentos válidos, de forma objetiva y subjetiva cuando sea pertinente una u otra forma
Muchos hemos tenido la oportunidad de comprobar cuanta Parentela vive angustiada con la carga del diezmo. Prédicas persistentes y sistemáticas han agobiado sus almas con un peso impuesto que muchas veces no pueden soportar; pero, si tuvieran en cuenta las palabras del Señor Jesús cuando dijo:
Evidentemente el diezmo fue individuo de los tantos tipos de ofrenda ordenada únicamente para el pueblo de Israel.